(Oooh, Your Aching Head!)
Estabas teniendo un día perfecto cuando, de golpe, la cabeza te empieza a doler. No te puedes concentrar en lo que estabas haciendo por lo mucho que te duele la cabeza. Y hasta es posible que te sientas indispuesto y se te revuelva el estómago.
¿Qué te pasa? ¿Cómo es posible que los niños tengan dolores de cabeza? O algo todavía más importante, ¿cómo puedes conseguir que se te vaya el dolor de cabeza o impedir que te vuelva a ocurrir?
Hay algo de debes saber: si tienes dolores de cabeza, no estás solo. A muchos niños les duele la cabeza de tanto en tanto. De hecho, es mucho menos frecuente que una persona no haya tenido ni un solo dolor de cabeza antes del inicio de la adolescencia.
Averigüemos más cosas sobre los dolores de cabeza y sobre cómo podemos evitarlos antes de que ocurran.
¿Qué es un dolor de cabeza?
Aunque tú lo puedas percibir de ese modo, un dolor de cabeza no es un dolor que afecta al cerebro. El cerebro te informa cuando te duelen otras partes del cuerpo pero, de hecho, no puede experimentar dolor. La mayoría de los dolores de cabeza ocurren fuera del cráneo, en los nervios, los vasos sanguíneos y los músculos que cubren la cabeza y el cuello. A veces los músculos o los vasos sanguíneos se hinchan, lo que significa que aumentan de tamaño.
También se pueden tensar o experimentar otros tipos de cambios que activan o ejercen presión sobre los nervios circundantes. Los nervios envían una ráfaga de mensajes de dolor al cerebro y tú acabas con un dolor de cabeza.
Diferentes tipos de dolor de cabeza
El tipo más habitual de dolor de cabeza es el dolor de cabeza tensional o por contractura muscular. Ocurre cuando ciertos músculos de la cabeza o del cuello ya estresados se siguen agarrotando o tensando demasiado. Cuando tienes este tipo de dolor de cabeza, el dolor suele ser sordo y constante. Lo puedes sentir como si algo te estuviera comprimiendo o apretando la parte anterior (o frente), la posterior o los lados de la cabeza.
Un dolor que sea especialmente agudo y punzante podría ser un signo de un tipo distinto de dolor de cabeza denominado migraña. Los dolores de cabeza de tipo migraña no son tan frecuentes como los tensionales, sobre todo en los niños, pero también pueden ocurrir. A veces, justo antes de presentar una migraña, el afectado ve puntos brillantes o líneas de luz onduladas. Esto recibe el nombre de aura. Asimismo, los niños afectados de migraña a menudo presentan molestias estomacales y pueden llegar a vomitar.
¿Cuál es la causa del dolor de cabeza tensional y de la migraña?
A veces, el dolor de cabeza solo es una parte de otra enfermedad, como un catarro, una gripe o un fuerte dolor de garganta. Cuando mejores, tu dolor de cabeza también mejorará.
Si no estás enfermo, también hay otros elementos que pueden desencadenar un dolor de cabeza. Por ejemplo, quedarse despierto hasta demasiado tarde, saltarse una comida o jugar al aire libre un día en que hace mucho sol durante demasiado tiempo pueden desencadenar dolores de cabeza.
El nerviosismo relacionado con un acontecimiento especial o la preocupación excesiva por algo (como un examen) también pueden desencadenar dolores de cabeza. Algunos niños desarrollan dolores de cabeza cuando van en coche o autobús o cuando fuerzan demasiado los ojos por pasar demasiado tiempo viendo la televisión o utilizando el ordenador.
Y los olores fuertes, como los perfumes, los humos, los gases o el olor de un coche o una alfombra acabados de estrenar, pueden desencadenar dolores de cabeza.
Hay algunos alimentos que pueden provocar dolores de cabeza en algunos niños, como el tocino, la mortadela y los perritos calientes. La cafeína que contienen los refrescos, el chocolate, el café y el té también los puede desencadenar. Los niños no necesitan tomar cafeína, de modo que es recomendable que la limites en tu dieta.
A veces no se conoce el motivo de que un niño tenga dolores de cabeza pero, en el caso de que tú los padezcas, lo más probable es que tengas algún pariente que también los presente. La tendencia a tener dolor de cabeza suele ser hereditaria. En otras palabras, es algo que se da en familias.
Ayuda para el dolor de cabeza
La mayoría de los dolores de cabeza desaparecen solos después de descasar o dormir durante un rato. Cuando te duela la cabeza, lo primero que deberías hacer es decírselo a un adulto para que te pueda ayudar. Acuéstate en una habitación fresca, oscura y tranquila y cierra los ojos. Ponte un paño, húmedo y fresco, sobre la frente o encima de los ojos. Relájate y respira lenta y profundamente.
Un adulto podría darte un medicamento para aliviar el dolor, que en lenguaje médico se llama "analgésico": paracetamol o bien ibuprofeno. Deberás evitar tomar aspirinas para tratar el dolor de cabeza, ya que este medicamento te podría provocar una enfermedad muy poco frecuente pero peligrosa denominada Síndrome de Reye.
¿Cuándo deberías ir al médico?
Es muy poco frecuente que los dolores de cabeza sean un signo de algo grave, como un tumor cerebral o una meningitis, sobre todo en los niños. Los desencadenantes de dolor de cabeza, entre los que se incluyen la ingesta de ciertos alimentos, estar estresado o no dormir lo suficiente, son las causas más probables de los dolores de cabeza en la población infantil. Y hay ocasiones en que se desconoce el motivo.
De todos modos, habrá veces en que tu madre o tu padre deberían hablar con tu médico sobre tus dolores de cabeza:
- cuando sea especialmente severo
- cuando no desparezca con facilidad
- cuando ocurra después de una lesión, como un golpe en la cabeza
- cuando te afecte la vista
- cuando vaya acompañado de sensaciones de hormigueo o adormecimiento
- cuando te sientas de una forma diferente a la habitual, como si no fueras tú mismo
- cuando te duela la cabeza una vez al mes o más a menudo
- cuando el dolor de cabeza te haga faltar al colegio
El médico podrá ayudarte y ayudar a tus padres a averiguar por qué tienes dolores de cabeza y es posible que te pueda ayudar para que no los desarrolles tan a menudo. A veces, lo único que necesitarás será practicar ejercicios de relajación, hacer cambios en tu dieta y/o modificar tus hábitos de sueño. En caso necesario, el médico te recetará medicamentos para controlar los dolores de cabeza.
Si te preocupan tus dolores de cabeza, no tienes que seguir aguantando el dolor. A veces te aliviarás con una simple siesta. Y en otras ocasiones necesitarás que te vea un médico. Pero casi siempre habrá algo que tú, tus padres y/o tu médico podréis hacer para aliviarte./p>